n Magdalena, los neumáticos fuera de uso (NFU) dejaron de ser un problema ambiental para convertirse en un recurso con destino seguro. Un convenio firmado entre la Municipalidad y la empresa Cemento Avellaneda permite recolectar y tratar las cubiertas de manera responsable, evitando su abandono en basurales o espacios abiertos.

Beneficios de la disposición responsable

• Reduce el riesgo de contaminación de suelos y cursos de agua.

• Disminuye la proliferación de mosquitos y plagas que encuentran refugio en neumáticos acumulados.

• Permite su uso como combustible alternativo en procesos industriales, reemplazando insumos fósiles.

• Favorece la economía circular, aprovechando un residuo que antes era basura.

Los riesgos de no gestionarlos correctamente
Un neumático abandonado puede tardar más de 500 años en degradarse. Su acumulación al aire libre favorece la reproducción del mosquito Aedes aegypti, transmisor del dengue, zika y chikungunya. Además, si son quemados de forma ilegal, liberan sustancias tóxicas como dioxinas y metales pesados, dañinas para la salud y el ambiente.

Desde el municipio destacaron que estas acciones forman parte de una política integral de gestión de residuos, orientada a lograr una comunidad más limpia, segura y sustentable.

“Seguimos construyendo una Magdalena más sustentable, entre todos”, remarcaron.